Puerto Iguazú. El inicio del próximo año es “muy esperado y con ansiedad” para los vecinos del barrio Bicentenario quienes solicitan la apertura y mejoramiento de calles, normalizar el servicio de agua potable y energía eléctrica, como así también las tareas de saneamiento del arroyo que bordea muchas viviendas de la zona.
El Bicentenario es uno de los barrios más nuevos del municipio donde una cantidad incalculable de familias se instalaron en los últimos años en espacios donde la lluvia ocasiona daños y malestar porque se forman grandes bañados como consecuencia de su ubicación en una cota más baja en relación con los barrios continuos como Unión y Primero de Mayo.
Para Nancy Villalba, presidente del barrio Bicentenario, las obras deberán iniciarse en enero o febrero porque recientemente la Municipalidad de Puerto Iguazú compró una excavadora hidráulica con su camión carretón y de esta manera podrá ingresar a concretar esos trabajos en una zona con barro, arena y piedras.
“Necesitamos mejorar muchas cosas en el barrio que quedaron pendientes de años anteriores y ojalá sea nuestro turno. ya hablamos con el intendente y dijo que será en enero si el tiempo acompaña”, dijo la referente barrial.
“El agua necesitamos urgente y el tema de la luz es muy complicado porque no da abasto por las conexiones que hay porque si o si se deben instalar tres transformadores pequeños para solucionar ese problema. Y el tema de las calles es fundamental porque es un barrio con muchas necesidades y se hace difícil los días de lluvia. Nos prometieron para enero el inicio de obras porque ahora hay unas máquinas nuevas con carretón que trabajan en otros barrios y que posibilita ingresar a trabajar en un barrio como el nuestro”, indicó.
Por otro lado, el vicepresidente del barrio se refirió a las familias que habitan en el lugar y opinó que dada la magnitud del barrio es preferible dividirlo en dos porque “es el barrio más grande de Iguazú”.
“Es así”, coincidió Nancy Villalba. Y dijo: “Es incalculable la cantidad de personas que habitan el barrio, por eso insistimos con las obras pendientes. El barrio se fue habitando cada vez más y las necesidades son urgentes; más aún con la luz y el agua”.
En ese sentido, la comisión directiva no descartó iniciar un censo como hicieron otras comisiones barriales y así conocer a las personas que habitan el lugar. “No nos conocemos entre nosotros de tanta cantidad de gente que vive aquí”, explicó.