Fin de semana largo con ocupación plena, restaurantes repletos y turistas transitando por los distintos atractivos turísticos de Puerto Iguazú, un destino turístico castigado económicamente por la pandemia y que busca reactivar su economía sin los brasileños que aún no llegaron como se esperaba.
“Fue como semana santa en octubre, algo así de similar”, graficó el empresario cabañero José Medina al momento de opinar acerca del fin de semana turístico. “No es fácil abrir un hotel o complejo de cabañas después de 17 meses y nos agarra este excelente fin de semana en medio de más inversiones que será difícil recuperar este año”, señaló. “Es deuda más deuda y seguimos adelante”, opinó.
El jueves las calles ya estaban teniendo un color diferente con muchos turistas que se anticiparon. El viernes y sábado la lluvia fue constante aunque nada frenó a los turistas a la hora de visitar cataratas y otros atractivos de la ciudad.
Con intensa y constante lluvia 7676 turistas visitaron el área cataratas del Parque Nacional Iguazú, mientras que el domingo lo hicieron 7524, teniendo en cuenta que más de 1300 personas volvieron a repetir la visita por segundo día consecutivo.
En las pasarelas los guías manifestaron inconvenientes para guiar a causa de la cantidad de visitantes. “Ya está liberado y no es obligatorio acceder a un guía, aunque muchos lo hicieron pero disconformes porque había mucha dificultad para transitar por los paseos”, señaló un guía.
En la gastronomía los restaurantes de la avenida Córdoba trabajaron a plenitud hasta la medianoche del sábado, domingo y lunes. “Este fin de semana fue muy bueno y muy positivo para el turismo y para los trabajadores, para todos porque fue el mejor fin de semana en cantidad de turistas desde la pandemia, incluso se puede decir que fue mejor que otros fines de semana largos anteriores a la pandemia”, comentó a El Turista en Misiones el empresario gastronómico Diego Bruno.